Es de buen augurio. Y digamos que es algo que podría asemejarse a una superstición pero que es más bien un gesto que anuncia buenas nuevas y días por venir felices.
Nació hace varias décadas este famoso canasto de los pobres. Desde cuando pistachos, almendras y demás nueces se conseguían a precios módicos. Cosa que hoy ya no sucede, siendo todas las nueces pero en especial los piñones y los mismo pistachos bastante costosos.
Pero el precio es otro tema. Lo que nos interesa es lo que hay dentro de ese canasto. De hecho, lo que se denomina canasto de los pobres viene de una tradición que dicta que en todos los hogares se encuentren pequeños paquetes de nueces y frutos secos reunidos en un mismo recipiente, sea éste canasto, bandeja u otro. Y este conjunto de alimentos va siendo ofrecido a los familiares y amigos con quienes se celebra la llegada del nuevo año. El canasto está llamado a permanecer varias semanas para convertirse así de cierta manera, en la permanencia de la fortuna.
De donde nació la tradición no se tiene datos certeros. Podría venir de uno de los países del Medio Oriente o de cualquier otro país del continente europeo donde se suelen encontrar y consumir los frutos secos y las nueces. Alimentos altamente nutritivos que, además de aportar la buena suerte, contribuyen al Bien-Estar.
En general, se acostumbra tener una variedad de siete productos, seleccionados según el gusto de cada hogar y la disponibilidad de los mismos alimentos. Son siete porque cada uno está llamado a simbolizar un día de la semana con lo cual se espera que cada día esté lleno de prosperidad y alegría.
Ya en el plano más cotidiano, y poniendo en otro canasto la tradición y la buena suerte, miremos lo que son estos frutos secos y nueces, los nutrientes que aportan y sus beneficios. Aparte del tenor en azúcares que puede no aventajar a un grupo de personas (diabéticos incluidos), ninguno de estos alimentos significa perjuicio. Al contrario.
Antes de mirar con detenimiento algunos de los seleccionados, digamos que conviene comprar las nueces naturales, antes de que sean sometidas a algún procedimiento. En general, cuando esto sucede, acaban con una cantidad grande de sal y algunas se ven adicionadas con aceite. Comprarlas al natural permite hacerlas dorar en casa poniéndolas simplemente sobre una paila, a fuego lento. Como sugerencia adicional, varias nueces y frutos pueden ser incluidos en la preparación de platos y alimentos cotidianos.
Una vez pasadas las épocas festivas, pueden guardarse en la nevera en donde se conservarán intactos.
Almendras
Entre las nueces son las que mayor cantidad de proteínas y fibras aportan. Son altamente recomendadas para las mujeres en edad de la menopausia. Entre sus nutrientes se incluyen la vitamina B2 o riboflavina, la B3 o niacina, magnesio, potasio, cobre, zinc y calcio. Son también fuente rica de vitamina E, las que algunos han presentado como la de la eterna juventud.
Como todas las nueces, son ricas en calorías por lo que se recomienda no abusar de ellas si se quiere evitar una ganancia de peso. A pesar de ello, sí vale la pena consumirlas a diario de manera moderada teniendo en cuenta sus altas cualidades nutricionales. En las dietas para adelgazar, pueden servir como alimento para engañar el hambre y producir saciedad.
Otra cualidad que encierran las nueces es que son exentas de grasas saturadas y sus aceites son definitivamente benéficos para la salud del corazón y el cerebro.
Nueces
Si se les mira con detenimiento, podrían tener una configuración parecida a la del cerebro y esto les ha otorgado la fama bien ganada de ser excelentes para el órgano maestro. Tanto es que se asegura que comer nueces todos los días despierta e incentiva la inteligencia.
Son las que más Omega 3 aportan y esto las convierte en grandes aliadas para combatir el taponamiento de las arterias e incrementar el colesterol bueno o HDL. Son también ricas en proteínas y aportan magnesio, fósforo y vitamina E.
Catorce nueces aportan 180 calorías.
Vale la pena mencionar los inmensos beneficios de las nueces del Brasil. Además de tener las mismas cualidades que las nueces del nogal, éstas son ricas en vitaminas de la familia B lo que las hace saludables para el sistema nervioso central. Para quienes sufren de depresión, se les recomienda comer una o dos nueces del Brasil todos los días.
Pistachos
Sin saber por qué, se les ha creado la mala fama de ser perjudiciales para el corazón y de manera especial se ha hecho creer que elevan los niveles del colesterol malo o LDL y por lo tanto incrementan el riesgo de sufrir de infartos y accidentes cerebrales.
A menos que se les consumiera fritos, cosa poco frecuente, los pistachos son muy benéficos. Por una parte, su tenor en grasas es inferior al de las nueces restantes lo mismo que su aporte en calorías. Cerca de 20 pistachos aportan 158 calorías.
Son ricos en vitaminas B y de manera especial en ácido fólico o B9, protector contra algunos cánceres y enfermedades cardíacas. El ácido fólico es además recomendado para las mujeres en gestación pues ayuda a prevenir malformaciones congénitas en el feto. Uno de sus inconvenientes es que es más rico en azúcares por lo cual se aconseja prudencia en el consumo por parte de diabéticos.
Avellanas
Son quizá las más recomendadas para las mujeres en edad de menopausia. Se deben ver como un complemento alimenticio de excelentes cualidades. Son muy ricas en vitamina E, en fibras, selenio, potasio, magnesio, fósforo, hierro, zinc y cobre. Dos cucharadas de avellanas (cerca de 30 gramos) aportan 190 calorías.
Castañas
No siempre se encuentran en estado natural sino envasadas en almíbar. Esto implica que su tenor en azúcares se eleve sensiblemente y que, por haber sido sometidas a cocción, hayan perdido parte de su contenido en vitamina C.
De hecho, son las que más vitamina C aportan entre los frutos secos. Entre sus nutrientes se incluyen el manganeso, cobre, fósforo, hierro, calcio, potasio y vitaminas B1, B2, B6 y B9. Son igualmente ricas en fibras.
Cada castaña aporta 18 calorías.
Frutos secos
Se citan los dátiles, albaricoques, ciruelas y uvas pasas. De manera general, todos estos frutos secos aportan buenas cantidades de fibra, hierro, vitaminas B. Son así mismo buena fuente de potasio, calcio, magnesio, cobre y polifenoles.
Una de sus cualidades es la de ayudar a combatir o evitar la anemia. Algunas, como la ciruela y el albaricoque son recomendados contra el estreñimiento.
Nació hace varias décadas este famoso canasto de los pobres. Desde cuando pistachos, almendras y demás nueces se conseguían a precios módicos. Cosa que hoy ya no sucede, siendo todas las nueces pero en especial los piñones y los mismo pistachos bastante costosos.
Pero el precio es otro tema. Lo que nos interesa es lo que hay dentro de ese canasto. De hecho, lo que se denomina canasto de los pobres viene de una tradición que dicta que en todos los hogares se encuentren pequeños paquetes de nueces y frutos secos reunidos en un mismo recipiente, sea éste canasto, bandeja u otro. Y este conjunto de alimentos va siendo ofrecido a los familiares y amigos con quienes se celebra la llegada del nuevo año. El canasto está llamado a permanecer varias semanas para convertirse así de cierta manera, en la permanencia de la fortuna.
De donde nació la tradición no se tiene datos certeros. Podría venir de uno de los países del Medio Oriente o de cualquier otro país del continente europeo donde se suelen encontrar y consumir los frutos secos y las nueces. Alimentos altamente nutritivos que, además de aportar la buena suerte, contribuyen al Bien-Estar.
En general, se acostumbra tener una variedad de siete productos, seleccionados según el gusto de cada hogar y la disponibilidad de los mismos alimentos. Son siete porque cada uno está llamado a simbolizar un día de la semana con lo cual se espera que cada día esté lleno de prosperidad y alegría.
Ya en el plano más cotidiano, y poniendo en otro canasto la tradición y la buena suerte, miremos lo que son estos frutos secos y nueces, los nutrientes que aportan y sus beneficios. Aparte del tenor en azúcares que puede no aventajar a un grupo de personas (diabéticos incluidos), ninguno de estos alimentos significa perjuicio. Al contrario.
Antes de mirar con detenimiento algunos de los seleccionados, digamos que conviene comprar las nueces naturales, antes de que sean sometidas a algún procedimiento. En general, cuando esto sucede, acaban con una cantidad grande de sal y algunas se ven adicionadas con aceite. Comprarlas al natural permite hacerlas dorar en casa poniéndolas simplemente sobre una paila, a fuego lento. Como sugerencia adicional, varias nueces y frutos pueden ser incluidos en la preparación de platos y alimentos cotidianos.
Una vez pasadas las épocas festivas, pueden guardarse en la nevera en donde se conservarán intactos.
Almendras
Entre las nueces son las que mayor cantidad de proteínas y fibras aportan. Son altamente recomendadas para las mujeres en edad de la menopausia. Entre sus nutrientes se incluyen la vitamina B2 o riboflavina, la B3 o niacina, magnesio, potasio, cobre, zinc y calcio. Son también fuente rica de vitamina E, las que algunos han presentado como la de la eterna juventud.
Como todas las nueces, son ricas en calorías por lo que se recomienda no abusar de ellas si se quiere evitar una ganancia de peso. A pesar de ello, sí vale la pena consumirlas a diario de manera moderada teniendo en cuenta sus altas cualidades nutricionales. En las dietas para adelgazar, pueden servir como alimento para engañar el hambre y producir saciedad.
Otra cualidad que encierran las nueces es que son exentas de grasas saturadas y sus aceites son definitivamente benéficos para la salud del corazón y el cerebro.
Nueces
Si se les mira con detenimiento, podrían tener una configuración parecida a la del cerebro y esto les ha otorgado la fama bien ganada de ser excelentes para el órgano maestro. Tanto es que se asegura que comer nueces todos los días despierta e incentiva la inteligencia.
Son las que más Omega 3 aportan y esto las convierte en grandes aliadas para combatir el taponamiento de las arterias e incrementar el colesterol bueno o HDL. Son también ricas en proteínas y aportan magnesio, fósforo y vitamina E.
Catorce nueces aportan 180 calorías.
Vale la pena mencionar los inmensos beneficios de las nueces del Brasil. Además de tener las mismas cualidades que las nueces del nogal, éstas son ricas en vitaminas de la familia B lo que las hace saludables para el sistema nervioso central. Para quienes sufren de depresión, se les recomienda comer una o dos nueces del Brasil todos los días.
Pistachos
Sin saber por qué, se les ha creado la mala fama de ser perjudiciales para el corazón y de manera especial se ha hecho creer que elevan los niveles del colesterol malo o LDL y por lo tanto incrementan el riesgo de sufrir de infartos y accidentes cerebrales.
A menos que se les consumiera fritos, cosa poco frecuente, los pistachos son muy benéficos. Por una parte, su tenor en grasas es inferior al de las nueces restantes lo mismo que su aporte en calorías. Cerca de 20 pistachos aportan 158 calorías.
Son ricos en vitaminas B y de manera especial en ácido fólico o B9, protector contra algunos cánceres y enfermedades cardíacas. El ácido fólico es además recomendado para las mujeres en gestación pues ayuda a prevenir malformaciones congénitas en el feto. Uno de sus inconvenientes es que es más rico en azúcares por lo cual se aconseja prudencia en el consumo por parte de diabéticos.
Avellanas
Son quizá las más recomendadas para las mujeres en edad de menopausia. Se deben ver como un complemento alimenticio de excelentes cualidades. Son muy ricas en vitamina E, en fibras, selenio, potasio, magnesio, fósforo, hierro, zinc y cobre. Dos cucharadas de avellanas (cerca de 30 gramos) aportan 190 calorías.
Castañas
No siempre se encuentran en estado natural sino envasadas en almíbar. Esto implica que su tenor en azúcares se eleve sensiblemente y que, por haber sido sometidas a cocción, hayan perdido parte de su contenido en vitamina C.
De hecho, son las que más vitamina C aportan entre los frutos secos. Entre sus nutrientes se incluyen el manganeso, cobre, fósforo, hierro, calcio, potasio y vitaminas B1, B2, B6 y B9. Son igualmente ricas en fibras.
Cada castaña aporta 18 calorías.
Frutos secos
Se citan los dátiles, albaricoques, ciruelas y uvas pasas. De manera general, todos estos frutos secos aportan buenas cantidades de fibra, hierro, vitaminas B. Son así mismo buena fuente de potasio, calcio, magnesio, cobre y polifenoles.
Una de sus cualidades es la de ayudar a combatir o evitar la anemia. Algunas, como la ciruela y el albaricoque son recomendados contra el estreñimiento.